En nuestro último blog, vimos la importancia de la oración para nuestro crecimiento espiritual, pero ¿qué pasa con actividades como la asistencia a las reuniones de oración? ¿Y cómo afectan estas actividades a nuestra creencia y en la comprensión de doctrinas importantes?
Asistencia a las reuniones de oración
La Encuesta de Miembros de la Iglesia Mundial 2017-2018 (GCMS 2017-18) preguntó a los miembros sobre su participación y compromiso en diversas prácticas espirituales. En general, casi dos de cada cinco (38%) encuestados informaron que en el último año, habían asistido a la reunión de oración en la iglesia una vez a la semana o más a menudo. Los encuestados de la División Africana Centro-Occidental y Centro-Oriental declararon la mayor participación en la asistencia a las reuniones de oración (53%), asistiendo una vez a la semana o más a menudo; esto puede estar relacionado con los valores culturales/religiosos y la mentalidad comunitaria del territorio en cuestión. Los miembros de la División Norteamericana (14%) y de la División Transeuropea (18%) fueron los que menos asistieron a las reuniones de oración una vez a la semana o más a menudo en el último año. Una vez más, es probable que esto esté relacionado con los valores culturales más seculares de estas divisiones, que tienden a ser más individualistas y autónomas.
2017-18 GCMS Q25.04, Total n=56676, DACO n=7217, DES n=1967, DIE n=3414, DIA n=4719, DNA n=1816, DNAP n=2576, DSA n=14236, DSOI n=4865, DPS n=3081, DSAP n=6491, DAS n=2787, DTE n=1222, DAO n=2285
Cabe mencionar que no había ninguna correlación entre la importancia de la oración en la infancia de los encuestados (concretamente el hecho de orar antes de las comidas) y su asistencia a las reuniones de oración en el momento de la encuesta. De ello se desprende que los miembros piensan de forma independiente y eligen participar (o no participar, según el caso) por su propia voluntad.
Orar en el nombre del Jesús
“Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre, para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra (Filipenses 2:9 y10 RVR1960).
A nivel mundial, el GCMS 2017-18 descubrió que casi todos los miembros de la Iglesia (90%) estaban de acuerdo en que la única manera de derrotar a los poderes malignos era a través de la oración en el nombre de Jesús. De ese número, dos tercios de los miembros estaban muy de acuerdo. Estos son buenos resultados, pero no debemos pasar por alto el pequeño número de los que no estaban de acuerdo o expresaron sus dudas. Puede ser que no hayan experimentado el poder de Jesús sobre las fuerzas del mal, que no hayan oído hablar de esos casos o que sus oraciones no hayan funcionado. Estas personas necesitan un apoyo y una atención especiales.
2017-18 GCMS Q42.22, n=56859
¿Qué muestra la investigación en el desglose por divisiones? En todas las divisiones, excepto en una, entre el 90% y el 95% de los encuestados estaban de acuerdo, en un grado u otro, en que la oración en el nombre de Jesús era la única forma de derrotar a los poderes malignos. Los encuestados de la División del Pacífico Sur son los que están más de acuerdo con esta afirmación (78%). Sorprendentemente, el menor acuerdo en esta pregunta se dio en la División Sudasiática; aun así, dos tercios estaban de acuerdo. Esta División es la que cuenta con el mayor número de personas que tienen dudas: aproximadamente una de cada cinco admite que no está segura y además, el mayor número de los que estaban en desacuerdo (alrededor de uno de cada diez). Esto se debe posiblemente a que estas personas viven en un contexto invadido por prácticas y creencias espiritualistas y a menudo son testigos de la gran controversia entre Dios y los poderes del mal. Por lo tanto, es muy real en esa parte del mundo y es importante reforzar su creencia en el poder de Jesús y proporcionar consejos prácticos sobre lo que puede hacer un creyente en esos encuentros. Al mismo tiempo, la investigación mostró que había personas que dudaban o estaban en desacuerdo con esta afirmación en cada División. En otras divisiones, las cifras de desacuerdo general oscilaban entre el 2% y el 6%, y las de dudas, entre el 2% y el 11%. Por lo tanto, aunque parece que los miembros de todo el mundo entienden el poder del nombre de Jesús, el desglose de las divisiones mostró que el acuerdo sobre esta creencia era ligeramente inferior en los lugares donde los miembros tenían más dudas sobre esta doctrina. Los dirigentes de la Iglesia deberían prepararse para abordar estas enseñanzas con más frecuencia desde el púlpito.
2017-18 GCMS Q42.22, Total n= 56859, DACO n= 7180, DES n=2061, DIE n=3682, DIA n=4489, DNA n=1693, DNAP n=2734, DSA n=13886, DSOI n=4988, DPS n=3109, DSAP n=6874, DAS n=2803, DTE n=1186, DAO n=2174
Aunque los investigadores no encontraron ninguna correlación entre la participación de los encuestados en las oraciones cuando eran niños (en concreto, orar antes de las comidas) y su creencia de que solo en el nombre de Jesús se puede derrotar a los poderes malignos y a los espíritus demoníacos, hay que señalar que la mayoría de los adventistas de todo el mundo creen en el poder que hay en el nombre de Jesús.
La oración es poderosa. Nos conecta con Dios y nos permite ver a los demás con los ojos de Jesús. La oración es vital para un creyente, y cuando nos reunimos en grupos de oración y en reuniones de oración y oramos por las necesidades de los demás, podemos ver la mano de Dios actuando en sus vidas. Estas experiencias fortalecerán nuestra fe y nos darán una confianza en el amor de Dios que ningún sermón puede inculcarnos. Por lo tanto, Mantengamos firme, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió. Y considerémonos unos a otros para estimularnos al amor y a las buenas obras; no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca.(Hebreos 10: 23-25).
La participación en la iglesia (aparte de los servicios religiosos del sábado por la mañana) nos ayuda a ver a Dios de una manera muy práctica. Al estudiar su Palabra con otros y ayudar a otros con sus necesidades, descubrimos y entendemos aún más el amor de Dios por nosotros; eso es importante para nuestro crecimiento y edificación espiritual. Dios nos ama sin importar nuestro trasfondo cultural, División, nación, tribu o lengua. Hablemos a otros de esta maravillosa esperanza, del poder de orar juntos y del poder de la oración en el nombre de Jesús, así como del poder de su amor.
Puede encontrar más resultados de la investigación sobre la oración en estos blogs:
Para ver más resultados de la investigación sobre la muestra total, consulte el informe de Meta-Análisis (Meta-Analysis report).
Creado en colaboración con el Instituto de Ministerios de la Iglesia (Institute of Church Ministry)
Publicado por ASTR el 05-04-2022