En nuestro último blog, examinamos cómo los miembros de todo el mundo perciben el papel y la reputación de su iglesia en la comunidad local, y si sentían que su iglesia local tenía la capacidad de comunicarse eficazmente a través de culturas, clanes, tribus y religiones. Hablamos de la importancia de conectar con los miembros de la comunidad exactamente a donde están antes de invitarles a seguir a Cristo. Sin embargo, ¿cómo se ve esto cuando se trata de relaciones personales?
La Encuesta de Miembros de la Iglesia Global 2017-18 (GCMS 2017-18) pidió a los encuestados que respondieran a múltiples preguntas sobre sus interacciones con las personas de la comunidad y sus opiniones sinceras sobre su nivel de actividades de alcance personal. ¡Estos resultados pueden sorprenderte!
Formación de amistades no adventistas
Se le preguntó a los participantes en el GCMS 2017-18 con qué frecuencia durante los últimos 12 meses habían dedicado tiempo en formar nuevas amistades con personas no adventistas en sus comunidades. Un poco más de una cuarta parte (27%) de los encuestados informó que lo hacía todas las semanas o más a menudo; otro 14% declaró que en el último año lo había hecho casi todas las semanas. Sin embargo, es preocupante que el 22% admitiera que solo había dedicado tiempo a entablar nuevas amistades con personas no adventistas una o dos veces en el último año (lo que significa que las interacciones iniciales probablemente tuvieron poco o ningún seguimiento), y el 14% admitió no haberlo hecho nunca. Así, mientras que el 53% pasó tiempo con personas no adventistas desde una vez al mes a varias veces a la semana, más de un tercio (36%) tuvo conexiones muy limitadas o ninguna con personas de fuera de la iglesia. Posiblemente, tienen amigos en la iglesia, están satisfechos con esta amistad y no sienten la necesidad o la responsabilidad de buscar nuevas relaciones con los no adventistas.
Satisfacer las necesidades de los no adventistas
Cuando se preguntó a los miembros con qué frecuencia durante los últimos 12 meses habían dedicado tiempo a satisfacer las necesidades de los no adventistas en su comunidad, los niveles de implicación fueron aún más bajos. Uno de cada cinco encuestados dijo que lo había hecho todas las semanas o más a menudo, y otro 11% ayudó a la comunidad casi todas las semanas. Sin embargo, una cuarta parte (la categoría más numerosa) declaró que solo lo había hecho una o dos veces en el último año; el 17% admitió que nunca había dedicado tiempo a satisfacer las necesidades de los no adventistas de su comunidad en el último año. Estas últimas categorías constituyen el 42% de los miembros que rara vez o nunca participan en los servicios comunitarios.
Aunque es positivo que algunos miembros participen en la formación de amistades y/o en la satisfacción de las necesidades de los no adventistas de la comunidad, es preocupante que tantos miembros declaren no hacerlo nunca o casi nunca. Formar amistades auténticas es una de las mejores maneras de conocer las necesidades de las personas y satisfacerlas allí donde se encuentran. Solo una vez que se haya llegado a conocer a estas personas y a sus necesidades, se puede llevarlas realmente a una relación con Cristo (que, de nuevo, apunta al Método de Cristo).
Esfuerzos personales para implicarse en la comunidad
Cuando se preguntó a los miembros si consideraban que los esfuerzos de su iglesia para satisfacer las necesidades de la comunidad local debían cambiar (aumentar o disminuir) o estaban en el nivel adecuado, casi tres cuartas partes (70%) de los miembros consideraron que la participación de la iglesia debía aumentar. Solo uno de cada cinco (22%) considera que los esfuerzos de su iglesia están en el nivel adecuado.
Cuando la pregunta se vuelve más personal, preguntando a los miembros si su propia implicación para satisfacer las necesidades de la comunidad local necesita cambiar (aumentar o disminuir) o está en el nivel adecuado, un número similar (72%) de los encuestados admitió que necesitaba aumentar su implicación en un grado u otro. Una vez más, aproximadamente uno de cada cinco (19%) considera que sus esfuerzos están en el nivel adecuado.
Es alentador que los miembros de todo el mundo vean la necesidad de aumentar la interacción en la comunidad y/o con los no adventistas, tanto a nivel de la iglesia como a nivel personal. Es necesario promover más el método de Cristo y el evangelismo de la amistad en las iglesias locales. Aunque los pastores y otros líderes de la iglesia deben enseñar a los miembros cómo aplicarlos y deben buscar oportunidades para que la iglesia tenga interacciones positivas con la comunidad local y fomente las relaciones con los que están fuera de la Iglesia, la responsabilidad no recae únicamente sobre sus hombros. Y todo lo que se necesita es una persona que esté dispuesta a arriesgarse y entablar una nueva amistad, todo por el bien de Cristo.
¿Está usted dispuesto a correr ese riesgo?
Si desea conocer más resultados de la investigación sobre la muestra total, consulte el informe de Meta-Análisis (Meta-Analysis report).
Creado en colaboración con el Instituto de Ministerios de la Iglesia
Publicado por ASTR el 27-07-2022
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